Movió ficha el BCE (ya era hora), y la prima de riesgo de España e Italia ha descendido de manera notable. A la espera de ver cómo evoluciona el tema en los próximos días (el anuncio de Moody´s de que mantendrá la triple A con la que califica a la deuda USA también es un balón de oxígeno), de momento todo el mundo gana. El BCE adopta una posición de fuerza que contrasta con mucho de lo hecho hasta la fecha, los países periféricos del euro respiran (¿ahora habrá que retrasar las elecciones generales en España?) y los malos de la película observan un movimiento que sospecho les complace, por aquello de que aleja de la orilla a los actores principales de esta obra. Veremos qué nos deparan los próximos actos.