ROBERT A. HEINLEIN. Las brigadas del espacio (Starship Troopers). Ediciones B, 335 páginas.
Panfleto militarista para unos, hito de la ciencia ficción para otros, Las brigadas del espacio es, ante todo, una entretenidísimanovela ambientada en un futuro distópico, en el que la Federación Terrestre se halla inmersa en una guerra intergaláctica cuyo origen nos es desconocido, y cuyo desenlace no se vislumbra. El protagonista es un joven de buena familia que, en contra de losw deseos paternos, decide alistarse en el ejército y, después de una durísima instrucción, va ascendiendo en la escala a medida que se suceden las acciones de combate.
A Heinlein pueden discutírsele mucho sus ideas políticas, bastante inclinadas hacia la derecha, pero no que es un notable narrador, extremadamente ágil en sus muy visuales descripciones y dotado de un envidiable sentido del ritmo. El autor, cuyo bagaje cultural no es ni de lejos escaso, no necesita intercalar rollos enormes para hacernos comprender cómo es esa sociedad futura que describe: intercala información a pinceladas, cuando la historia lo exige, y jamás apabulla al lector con excursos seudocientíficos que le hagan perder el hilo. No en vano, algunos de los mejores libros de ciencia ficción llevan su firma, y cuando, en 1960, publicó Las brigadas del espacio, ya llevaba más de veinte años dedicado al género y dado a la imprenta obras notables como Amos de títeres. La que es su obra maestra, Forastero en tierra extraña, fue su publicación inmediatamente posterior a Las brigadas del espacio, lo que demuestra que por aquellos años la creatividad de Heinlein se hallaba en su punto álgido. Ameno incluso cuando es discursivo, enérgico en la acción, riguroso en las afirmaciones científicas y con mucha capacidad para enganchar al lector, Las brigadas del espacio reúne gran parte de las mejores cualidades de su autor, pese a su carácter indiscutiblemente militarista, que el cineasta holandés Paul Verhoeven pervirtió bastante en la muy reivindicable adaptación cinematográfica que hizo de esta novela hace ya más de una década. Derechista, lo que quieran, pero esta frase que Heinlein hace pronunciar al instructor en Historia y Filosofía Moral del protagonista de la novela debería hacernos reflexionar: » La violencia, la fuerza bruta, ha zanjado más asuntos en la historia de lo que lo ha hecho cualquier otro factor, y toda opinión contraria es confundir los deseos con la realidad, pensamiento voluntarista de la peor especie. Quienes han olvidado esa verdad básica, siempre lo han pagado con la vida y la libertad».