Ha muerto un escritor mayúsculo, uno de esos individuos dotados de un don especial para narrar historias, un hombre que (re)creó un mundo que han disfrutado generaciones de lectores de todo el planeta. De entre sus varios libros excelentes, de entre esas obras que todo el mundo debería leer, yo, como todo mortal, tengo mi favorita, ése que a mi entender está todo lo cerca de la perfección que puede estar una novela: Crónica de una muerte anunciada, quintaesencia del arte del escritor colombiano. Maestro en casi todo, y desde luego en el arte de iniciar y acabar sus novelas, Gabriel García Márquez ocupa por méritos propios un lugar destacado en la historia de la literatura.