El ciclo de conciertos Round about midnight, que se organiza en el teatro Coliseum, nos trajo anoche a Jane Monheit, una vocalista cuya carrera abarca todo lo que llevamos de siglo. El local estaba acondicionado muy al estilo americano, con mesas, servicio de bar (circunstancia molesta para quienes vamos a los conciertos a escuchar música) y un público variopinto, como podría esperarse por el horario y por el hecho de que, en este largo fin de semana, la huida de aborígenes de Barcelona ha sido masiva. La audiencia se dividía, pues, entre los bastante entendidos y quienes no acabaron de aprovechar el dinero que gastaron sus padres en su educación.
Pero vayamos al concierto. La cosa iba de tributo a Judy Garland, uno de los iconos del show-business estadounidense. Y se disfrutó, porque Jane Monheit es dueña de una de las mejores voces del universo jazzístico contemporáneo. Su propuesta no tiene nada de rupturista, pero está llena de swing y buen gusto. Además, la cantante derrochó simpatía, lo que siempre es de agradecer (excepto en los elogios a la ciudad que la acogió, los cuales fueron directamente empalagosos, término que a veces roza el estilo vocal de Monheit), y cantó de maravilla, pese a que la excesiva temperatura reinante en el local no constituía el marco ideal para el lucimiento de los artistas. En lo estrictamente musical, mucho swing, como ya se ha dicho, un acompañamiento (la banda de Monheit la forman Michael Kanan al piano, Neal Miner al contrabajo y Rick Montalbano en la batería) que fue un dechado de pulcritud, algunas baladas y una serie de medleys en la parte final, de entre los que destaco el que unió On the sunny side of the street y Get happy. Otros momentos álgidos fueron How about you?, That old black magic y la esperadísima Over the rainbow, que dio paso a dos tandas de bises que concluyeron con una excelente versión de Every time we say goodbye, de Cole Porter. Jane Monheit no nos trajo nada nuevo, pero hizo disfrutar con su prodigiosa voz y lo agradable de su propuesta. Poco antes de la una y media de la madrugada, la cantante dio por concluida una actuación de un estilo raro de ver por estos lares.
Una que sonó anoche:
Y una que no, pero bien podría haberlo hecho: