Parece que el diputado de la mayoría parlamentaria Lewis Lake va diciendo por ahí que los funcionarios desobedientes con el procés serán sancionados. Joder con los demócratas. No obstante, hay que tomarse en serio esta amenaza: si el castigo por ser refractario al separatismo es tener que escuchar la discografía completa del susodicho, aquí se hace indepe hasta García Albiol.