Puestos a subrayar obviedades, costumbre muy necesaria en tiempos de sinrazón, no está de más recordar a Séneca.
«NADIE SE CREE CULPABLE SI ÉL MISMO ES SU JUEZ».
Puestos a subrayar obviedades, costumbre muy necesaria en tiempos de sinrazón, no está de más recordar a Séneca.
«NADIE SE CREE CULPABLE SI ÉL MISMO ES SU JUEZ».