Dice el inefable Francesc Homs, Quico para los amigos, que «si es tracta de vendre caramels als nanos, Varufakis; si es tracta de resoldre les coses, posi´m vostè una altra recepta». En primer lugar, no sé si esta profunda reflexión será muy del agrado de los alternativos a los que la banda de Homs lame el trasero para que les apruebe los presupuestos. Dicho lo cual, uno agradecería que las críticas a Varufakis no tuvieran que venir de un pigmeo político. Siguiente punto: la receta que le gusta a Homs es la que nos ha convertido en Valencia del Norte. Coda: no hables de vender caramelos a los niños, Quico, gran insultador de inteligencias: el procés no es otra cosa.